CRÓNICA
Quinta conferencia de la serie organizada por la S. M. E.
Ha ocurrido á veces en las Ciencias de observación que un conjunto de leyes naturales se muestren incompatibles con las teorías matemáticas hasta entonces suficientes, por conducir á contradicciones manifiestas que, no pudiendo hallarse en la Naturaleza, es menester localizarlas en nuestros razonamientos.
Cuando al surgir la dificultad se ha encontrado constituido un cuerpo de doctrina con condiciones propias para las nuevas necesidades, el remedio ha sido fácil si se prescinde de la inercia del espíritu para los cambios bruscos de orientación. Tal es el origen de la moderna teoría de la relatividad.
Los principios fundamentales de la Mecánica clásica aplicados á las Ciencias físicas, en el capítulo que puede llamarse Física del éter, traen aparejadas contradicciones de monta que únicamente pueden borrarse generalizando el principio del movimiento relativo, en el sentido de asentar la imposibilidad de reconocer el movimiento absoluto en el espacio, sean cuales fueren los métodos puestos en práctica para tal fin.
Pero tal principio exige la desaparición de ideas y nociones que parecían axiomáticas, como la invariabilidad de forma de los cuerpos en movimiento, la posibilidad de realizar una velocidad tan grande como se quiera, etc. Todos estos pretendidos axiomas son consecuencia de la supuesta independencia absoluta del espacio y el tiempo, traducción la más simple de la disparidad de naturaleza de ambas entidades, pero que no está en forma alguna impuesta por la observación. La Ciencia que parte del principio de relatividad conserva, como no podía menos, la distinción necesaria, pero al mismo tiempo admite una relación entre ambas, considerando al Universo como un hiperespacio de cuatro dimensiones. Mas estas cuatro dimensiones no son equivalentes, como las tres del espacio ordinario, sino que una de ellas, la correspondiente al tiempo, es de naturaleza distinta que las restantes. Nace de aquí el que la Geometría que corresponde á este hiperespacio pertenezca al grupo de las no euclídeas, si bien las variedades definidas en él por la condición t= const., y que, por ende, traducen las propiedades geométricas de los cuerpos, siguen satisfaciendo á los postulados de la Geometría de Euclides.
Esta es, en líneas generales, la idea desarrollada por D. Blas Cabrera en la notable conferencia sobre la « Aplicación á la Física de la Geometría de cuatro dimensiones », dada en el Instituto de Ingenieros Civiles de España el 18 de Febrero último.
Por la exposición magistral y lo vasto de los conocimientos revelados, fué premiado el Sr. Cabrera con un aplauso unánime.
La Redacción de la REVISTA DE LA S. M. E. repite aquí al ilustre Catedrático el testimonio más sincero de su gratitud y admiración.
Sesión celebrada por la S. M. E. el día 2 de Abril de 1914.
Extracto del acta.
Preside D. Eduardo Torroja.
Es leída y aprobada el acta anterior.
Se da cuenta de una atenta carta del Sr. Jiménez Rueda comunicando a la Sociedad que por motivos de salud y ocupaciones privadas ineludibles se ve obligado á presentar su dimisión del cargo de Delegado español de la Comisión internacional de la Enseñanza matemática ; acordándose que el Sr. Octavio de Toledo y el P. Moreno hagan gestiones cerca del Sr. Jiménez á fin de que no curse su dimisión al Comité central.
Se acuerda, á propuesta del Sr. López Soler, visitar al Sr. Ministro de Instrucción, acompañando una instancia razonada solicitando una subvención para nuestra Sociedad. Componen la Comisión el Sr. Archilla, Marqués de Echandía, Pérez Muñoz, Jiménez Rueda, Octavio de Toledo, León y Ortiz, López Soler y Mataix.
A propuesta del P. Moreno, se acuerda dar un voto de gracias al Sr. Mingot por el acierto con que ha desempeñado el cargo de Tesorero, que se ve obligado á dejar por tener que ausentarse de Madrid.
Se acuerda autorizar á la Presidencia, Secretarios y Sr. Mingot para elegir la persona á la que se le encarguen los servicios de Tesorería y Administración de la Sociedad por una pequeña retribución.
Se proponen para socios numerarios los siguientes :
D. Joaquín Jiménez, presentado por los Sres. Torner y P. Moreno y D. Miguel Marín, presentado por los Sres. Rodríguez Sanz y Jiménez Aparicio.
Se acuerda nombrar una Comisión compuesta de los Sres. Marqués de Echandía, Torner, Fernández Cortés, Castizo, Sánchez Pérez y Mingot para que estudie y redacte unas bases generales de modificación de la segunda enseñanza en lo que se refiere á la enseñanza de las matemáticas, bases que serán discutidas en sesiones especiales consagradas á este fin.
A continuación, antes de levantar la sesión, el Sr. Mingot desarrolló un interesante estudio de problemas relativos á la Representación de las figuras esféricas, siendo muy aplaudido.
Obra nueva.
La Sociedad Matemática Española pone en conocimiento de sus miembros y público en general que se halla á la venta la tercera de las obras editadas por la misma : Matemáticas prácticas, por JOHN PERRY, traducción del inglés por D. Luis GAZTELU, Marqués de Echandía.
Esta es la segunda de las obras de la serie de obras elementales que la Sociedad Matemática Española inició con el Cálculo infinitesimal al alcance de todos y que se propone continuar ; está especialmente dedicada á los que desempeñen profesiones técnicas, y esperamos que la acogida que el público español le dispense secunde el éxito alcanzado por este libro en Inglaterra y en los Estados Unidos.
El precio de cada ejemplar (308 páginas en 8.º mayor, con 51 figuras) es de 4,50 pesetas para los miembros de la Sociedad Matemática Española y 6 pesetas para el público.